Osezno rescatado será enviado al Bioparque

Un osezno de no más de seis meses fue rescatado ayer en el área de influencia del río Pilcomayo, que es el área de trabajo del proyecto de conservación del oso andino o jucumari implementado por la Organización No Gubernamental (ONG) Protección Medioambiental de Tarija (Prometa) y que, luego de una evaluación, será llevado al Centro de Custodia de Fauna Silvestre o Bioparque Urbano.AmenazaLa bióloga especialista en conservación y parte del equipo de la ONG, Claudia Oller, explicó que se trata de una cría de la especie Tremarctos Ornatus, la única que tiene Sudamérica y que se encuentra amenazada por la fragmentación y pérdida de su hábitat y conflictos con los humanos porque en el área rural la ganadería está ocupando sus espacios.Contó que fue un transportista que se encontraba por la zona y se tropezó con la madre y dos crías, ésta escapó pero dejó a uno de los oseznos. Esta persona lo tomó y lo llevó a las oficinas de Prometa. Por esta razón la cría llevará su nombre, “Pancho”.“Es una especie que está en peligro porque son cazados por los comunarios a causa de que atacan el ganado y les provocan pérdidas económicas”, apuntó.Oller contó que parados los machos pueden alcanzar los dos metros de altura y las hembras son un tercio más pequeñas. Son vegetarianos, en la zona de bosque seco se alimentan de bromelias, payos o taracas, mientras que en las partes más altas de cactáceas y bayas. Ocasionalmente podrían comer carne.El ejemplar será entregado a la entidad encargada de su protección al Bioparque Urbano. Oller apuntó que es deseable que un animal silvestre esté en su medio natural, en el monte, pero que en este caso, al tratarse de una cría, su rehabilitación para poder ser reintroducida puede ser poco posible. A su vez, el director de Prometa, Rodrigo Ayala, agregó que junto a las autoridades de la Dirección General de Biodiversidad (DGB) y de la Alcaldía evaluarán el estado psicológico del animal, su capacidad de reinserción y obviamente se trabajará en ese sentido. Caso contrario se buscará darle las mejores condiciones en un refugio de vida silvestre donde comparta con otros individuos de su especie.Artículo Original: El País