La Cancillería es la sede de la cita trinacional de Bolivia, Argentina y Paraguay, en la que se analizan los problemas y la preservación del río que atraviesa por esos países.La Comisión Trinacional para el Desarrollo de la Cuenca del Río Pilcomayo analiza desde ayer, en la Cancillería, el manejo integral del río Pilcomayo, que atraviesa por Bolivia, Argentina y ParaguayEl director general de Límites, Fronteras y Aguas Internacionales Transfronterizas de la Cancillería, Róger Matos, explicó que cada año Bolivia, Argentina y Paraguay coordinan acciones para preservar la fauna y flora de ese río.“La reunión preparatoria comenzó hoy (por ayer), y hay una agenda de 12 puntos para la gestión del río Pilcomayo, donde se incluyen aspectos especiales como (la preservación) del sábalo, la dinámica del río, calidad del agua y otros”, dijo Matos.La autoridad explicó que las reuniones preparatorias permitirán que los delegados de cada país aprueben los convenios u otros en esa problemática.El vicecanciller Juan Carlos Alurralde, quien tiene pleno conocimiento de cuencas y de los procesos que se deben efectuar para preservar el cauce del río y la vida que lleva consigo, presidirá la delegación de Bolivia, dijo Matos.Las reuniones, además, servirán para evaluar los avances del plan de gestión de la cuenca del río Pilcomayo.También servirán para coordinar las medidas a corto, mediano y largo plazo, referidas al Pilcomayo.En la cita trinacional, que concluirá hoy, Bolivia presentará propuestas que incluyen las medidas de carácter integral en las cuencas alta, media y baja, con controles de la erosión, el transporte de sedimentos y la limpieza hidráulica del río en los tres países, explicó Matos.La autoridad sostuvo que Bolivia también hizo estudios sobre la dinámica del desarrollo del sábalo y otras especies piscícolas, para promover su desarrollo y dinamizar la actividad pesquera en el país.En esa línea, Matos, por ejemplo, adelantó que Bolivia planea abrir un centro de investigación piscícola en Villamontes (Tarija).Asimismo, prevé rehabilitar los bañados en territorio boliviano para el desarrollo de los peces, además de implementar medidas estructurales de ingeniería para el mejor aprovechamiento de los recursos hídricos del Pilcomayo.